5.01.2007

Viento de abril

Me detuve incierta a mirar el misterio del viento,
arriba se mecían suaves las ramas de árboles enmudecidos por Dios,
abajo un hombre con ojos de luz observaba atento mis palabras sin voz,
y aún asi me distraía el sonido del susurro, marcaba el inicio incómodo de próximos cambios en otros seres, algo incierto viene con él, más la hora me marca el tiempo de despedirme sin mucho que decir...
Quizá mañana pueda contar la historia de aquella mujer jorobada que suele pasar inadvertida entre sonidos superficiales y tiempo sin demora...
No hay razón en el relato... solo el fin de un lunes cualquiera.

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